Oído taponado: ¿qué hay que hacer?
Varias causas pueden dar la sensación de tener un oído taponado. Hay que actuar entonces de forma acertada para un desatasco eficaz.
Varias causas pueden dar la sensación de tener un oído taponado. Hay que actuar entonces de forma acertada para un desatasco eficaz.
Cuando se tapona un oído, se generan sensaciones que es difícil ignorar. La sensación puede ser puntual o durar más tiempo en función de su origen, pero se caracteriza por síntomas tales como:
Estas sensaciones se explican por el hecho de que las ondas sonoras llegan modificadas al tímpano porque han encontrado un obstáculo en el canal auditivo: agua, aire a presión, cerumen… Llegando los sonidos de forma amortiguada. Algunas personas pueden incluso llegar a tener picores, chasquidos en los oídos o en los senos nasales, o incluso notar ligeramente la sensación de que les da vueltas la cabeza cuando se quedan inmóviles.
Estos síntomas pueden ser fruto de causas variadas. Es importante identificar con precisión su origen con el fin de poder actuar de forma eficiente. Si estos síntomas persisten, se recomienda consultar a un médico para que realice un examen clínico o acudir a un centro auditivo. Puedes concertar una cita para una prueba auditiva gratuita* en uno de nuestros centros ALAIN AFFLELOU Audiólogo a efectos de hacer un balance de tus capacidades auditivas con un profesional.
La altitud tiene un verdadero impacto sobre nuestro oído, conllevando a un cambio de presión susceptible de causar problemas de audición. Con la altitud, la presión se debilita y la trompa de Eustaquio no consigue siempre, o por lo menos no de forma inmediata, reequilibrar este cambio de presión con el fin de preservar el tímpano.
Las actividades de montaña como el esquí, el alpinismo y las excursiones te exponen por lo tanto a este tipo de sensaciones de oído taponado. Se producen aún más claramente cuando el cambio de presión es rápido, en especial cuando subes en coche por una carretera empinada, cuando coges un avión o una telecabina, tanto para subir como para bajar. Lo mismo ocurre si practicas el buceo. En los casos más extremos (lesión), hablaremos entonces de barotraumatismo.
Cuando el oído se tapona debido a un cambio de presión, dispones de varias situaciones:
En todos los casos, el objetivo es el de abrir las trompas de Eustaquio. Por ser más técnica, la maniobra de Frenzel es más específica para la práctica del buceo. Si parece que ninguna de estas maniobras funciona y si la sensación de oído taponado se prolonga más allá de algunas horas, se recomienda consultar con un médico o un audiólogo.
En caso de una infección en el ámbito ORL (otorrinolaringológico), compuesto por la nariz y la garganta, las trompas de Eustaquio se encuentran también afectadas, además de las mucosas y otras zonas que pueden inflamarse e hincharse. Al igual que en un cambio de presión, las trompas de Eustaquio se cierran, especialmente en caso de:
No siempre ocurre pero no es raro experimentar la sensación de oído taponado cuando se contrae una de estas enfermedades. En la mayor parte de los casos, no hay que tratar el oído taponado en sí mismo: este síntoma desaparecerá al tratar el origen de la enfermedad. Por lo tanto tienes que acudir al médico si no se cura en unos pocos días. Te prescribirá los medicamentos necesarios. Mientras tanto, la maniobra de Valsalva puede aliviarte puntualmente.
Aunque no se trate de una infección, la enfermedad de Ménière puede también ser la causa de una sensación de oído taponado o provocar una pérdida de audición, incluyendo vértigos intensos. Esta enfermedad crónica se manifiesta por crisis. Para ellos podrás concertar una cita con nuestros audioprotesistas para contemplar el uso de audífonos, que te permitirá compensar la pérdida auditiva.
Si tu oído está taponado debido a una infección, se recomienda evitar la práctica de una actividad que pudiera agravar el problema. Es mejor no viajar en avión, no hacer buceo ni alpinismo mientras dure la enfermedad.
El oído produce cerumen de forma natural, lo que le permite autolimpiarse y servir de protección. En efecto, esta cera ligeramente pegajosa atrapa pieles muertas, pequeños insectos, bacterias y otros intrusos en el canal auditivo antes de eliminarlos progresivamente hacia el exterior. Sin embargo, por motivos genéticos especialmente, algunas personas regulan mal su producción de cerumen, que se fabrica en exceso, siendo más difícil que se evacue de forma natural, lo que puede acabar creando un tapón. Una densidad elevada de pelos en el oído o una mala utilización del bastoncillo de algodón pueden también conducir a una acumulación de cerumen en el canal auditivo, causando un tapón que conduce a la sensación de oído taponado.
En esos casos, será necesario destapar el oído eliminando el exceso de cerumen. Contrariamente a una costumbre extendida, el bastoncillo de algodón no es su mejor aliado porque se limitará a empujar el tapón aún más cerca del tímpano. Más vale reblandecer el cerumen para que se evacue más fácilmente. Se pueden poner en práctica varias técnicas:
Estos productos deben introducirse con suavidad. Mantén la cabeza inclinada en un lado durante algunos minutos y repite la operación cada día hasta que el cerumen se disuelva y no olvides nunca secar bien tu oreja con el fin de limitar los riesgos de infección. Si llevas un audífono, debes limpiar con regularidad tu filtro anti cerumen y no dudes en pedir consejo en uno de nuestros centros ALAIN AFFLELOU Audiólogo para el mantenimiento de tus audífonos.